Si bien tener los pies hinchados no es un problema para mucha gente, con el tiempo pueden transformarse en un verdadero trastorno.
Definitivamente la hinchazón en los pies nos limitan y nos hacen sentir incómodos. Por lo tanto, vale la pena cuidar los pies, que deben soportar el peso de todo el cuerpo al estar de pie o caminar. ¿Cómo podemos tratar este problema?
¿Cuáles son las causas de los pies hinchados?
Las causas más comunes de pies hinchados son un estilo de vida sedentario, obesidad o sobrepeso y el uso de calzado incomparable. Sin embargo, esto no es todo. También pueden intervenir otras causas, a saber:
- mala circulación sanguínea
- beber alcohol
- fumar
- cantidad excesiva de sodio acumulado en el cuerpo
- insuficiencia arterial
- artritis
- diabetes
- embarazo
¿Cómo hacer para bajar los pies hinchados?
Consume productos con magnesio
El magnesio es un elemento muy importante para nuestro cuerpo. Su falta o nivel bajo puede provocar hinchazón , más fatiga y una circulación sanguínea más débil. Por lo tanto, vale la pena buscar productos como el cacao o las legumbres que contienen grandes cantidades de magnesio. Alternativamente, puede ayudar con productos suplementarios , como tabletas de magnesio soluble.
Beber abundante agua
Cuando nuestro cuerpo no recibe suficientes ingredientes o recursos que necesita, comienza a acumular lo que ya tiene. Es un mecanismo que busca asegurar el buen funcionamiento del cuerpo. En este caso, es el agua, que en efecto comienza a manifestarse a través de los pies hinchados. Por lo tanto, es necesario garantizar una hidratación adecuada del cuerpo para que se vea obligado a retener mayor cantidad de agua de lo normal.
Sales de Epsom
Esta sal relaja y reduce la hinchazón, la fatiga y el dolor de pies. Lo único que debes hacer es agregar medio vaso de sal de epsom a un recipiente con agua tibia y luego de mezclar, darte un baño de pies. Asegúrate de remojarlos durante unos 20 minutos. Sigue esta técnica hasta que desaparezca el problema.
Reposa con los pies en alto
Uno de los consejos mientras estás sentada o acostada es colocar tus pies en alto. Para ello puedes utilizar un almohadón o cojín. La idea es que tus pies estén unos 10 a 15 centímetros más altos que tu cadera.
Ejercicios ligeros
- Estos ejercicios no son exhaustivos y solo necesitamos unos minutos para ellos. Al principio es suficiente que nos recuestemos al aire libre y estiremos los pies hacia el techo. En esta posición, nos acostamos unos 3 minutos y bajamos las piernas.
- Luego tomamos una pelota de tenis y le ponemos un pie. Comenzamos a hacer movimientos circulares con el pie , girando la pelota debajo. Luego cambie el lado y masajee el otro pie. Si tiene pies sensibles, puede sentirse incómodo al principio, pero con el tiempo comenzará a sentirse relajado.
- Al final hacemos masaje de manos. Para esto, es mejor usar aceites de calentamiento que relajen nuestros pies. Este masaje se realiza mejor durante unos 7-10 minutos.
- Flexiona los pies hacia arriba.
- Realiza movimiento de rotación con los tobillos y mueve los dedos de los pies. Esto ayuda a reducir la cantidad de líquidos retenidos.
- Hazte masajes y baños con agua fría o agua caliente. Ayudarán a mejorar la circulación de la sangre en tus pies. Esto propicia una disminución de la hinchazón al tiempo que gozarás de mayor relajación en tus piernas y pies por varias horas.
Elige posturas cómodas y seguras
Tener los pies o piernas cruzadas complican la adecuada circulación de la sangre en esta zona del cuerpo. Esto puede ocasionar, a la larga, que padezcas de pies hinchados.
Prioriza tu comodidad: usa ropa y calzado adecuados
Si sufres de pies hinchados es muy importante que uses ropa cómoda y holgada que no ejerza presión sobre tu cuerpo. Asegúrate usar aquellas prendas con las que puedas moverte y sentirte más libre, suelta y cómoda. Asimismo, utiliza zapatos o calzado liviano y que no ejerza presión sobre el pie. Elige los de horma más ancha.
¿Cómo darse correctamente los masajes?
Pies hinchados en el embarazo
Uno de los síntomas comunes en mujeres durante el embarazo es tener los pies hinchados. Es el resultado de un incremento en la producción de fluidos corporales y, por consecuencia, un mayor volumen de líquidos retenidos en el cuerpo.
Otra causa que provoca pies hinchados en el embarazo son los cambios en la fisiología femenina. De hecho, el útero va creciendo permanentemente durante esta etapa de la mujer. Esto provoca que aumente cada vez una mayor presión en las venas localizadas en la zona pélvica y vena cava. El resultado es la hinchazón de las extremidades inferiores (pies).
Pies hinchados por diabetes
Existe una condición no muy frecuente pero que afecta a pacientes diabéticos denominada «Pie de Charcot». Se cree que afecta a menos del 1% de los pacientes que padecen esta enfermedad.
No obstante, esta patología parece estar creciendo paulatinamente en Estados Unidos, conforme aparecen más casos de personas que contraen diabetes.
El pie de Charcot ocurre de forma repentina produciendo debilidad en los huesos del pie. La causa es neuropatía severa o lesión nerviosa. Algo común en personas que padecen diabetes.
Las consecuencias de este mal pueden derivar en trastornos en las articulaciones, fracturas, deformación del arco del pie y aparición de otras malformaciones y ulceras. El desarrollo de esta enfermedad puede incluso obligar a practicar la amputación y aún producir la muerte.
Conforme ocurre el desarrollo de esta condición, la planta del pie puede deformarse formando un bulto en sentido contrario al arco. Quienes padecen pie de Charcot no sienten dolor en sus miembros inferiores. Esto hace que caminen como si nada, empeorando aún más su condición.
Si bien el pie de Charcot es irreversible, puede lograrse detener el desarrollo de esta patología si es tratada en su fase temprana.
En suma y para concluir, los pies hinchados pueden ser un gran problema. Es importante no ignorar el problema y actuar lo antes posible, antes de sufrir consecuencias indeseables.