Conoce aquí las causas más importantes y síntomas de la depresión. ¡También te compartimos 5 maneras de superarla!
La depresión muchas veces obedece a la producción de ciertos hechos o situaciones que afectan nuestra vida. Estos pueden provocarnos tristeza, pérdida, ira o frustración.
La depresión es un trastorno psicológico que nos provoca sentimientos negativos y un estado de infelicidad, abatimiento y desánimo que puede variar según los casos. Es normal que todas las personas hayan pasado por esta condición por períodos de tiempo cortos. Sin embargo, cuando es sufrida por un tiempo más largo o de forma permanente es necesario realizar una consulta a un especialista.
Causas de depresión
Existen varios factores que pueden aumentar la probabilidad de depresión. Entre las causas más comunes de esta patología, se cuentan las siguientes:
- Abuso. El abuso físico o emocional padecido por una persona en el pasado puede aumentar el riesgo a padecer depresión más adelante durante su vida.
- Efecto de ciertos medicamentos . Algunos medicamentos, como la isotretinoína (utilizada para tratar el acné) el fármaco antiviral interferón alfa y los corticosteroides, pueden aumentar el riesgo de depresión.
- Conflictos. La depresión en alguien que tiene la vulnerabilidad biológica de desarrollar depresión puede ser el resultado de conflictos personales o de relación con familiares, amigos o personas de su entorno.
- Muerte o pérdida. La tristeza o el dolor por la muerte o pérdida de un ser querido, aunque se trate de un hecho natural, puede aumentar el riesgo de depresión.
- Genética. El factor hereditario en la depresión puede aumentar el riesgo a padecer esta enfermedad. Se cree que una persona cuyos padres o abuelos hayan sufrido depresión tiene mayores probabilidades de padecerla. La genética de la depresión, como la mayoría de los trastornos psiquiátricos es un tema complejo para desentrañar por los especialistas.
- Eventos importantes. Ciertos sucesos o eventos como mudarse, perder un trabajo o ingresos, divorciarse o jubilarse pueden llevar a la depresión. Aún aquellos hechos favorables como iniciar un nuevo trabajo, graduarse o casarse, pueden producir el desarrollo de esta patología.
- Otros problemas personales. El aislamiento social producto del padecimiento de otras enfermedades mentales, la discriminación o segregación de un grupo pueden causar depresión. Por ejemplo, alguien que fue expulsado de una familia o grupo social al que pertenecía está expuesto a riesgo de desarrollar depresión clínica.
- Enfermedades graves. En ocasiones, la depresión aparece íntimamente ligada con una enfermedad grave, como ciertos pacientes con cáncer.
- Abuso de sustancias . Casi el 30% de las personas con problemas de abuso de sustancias y estupefacientes padecen depresión clínica.
Síntomas de la depresión
A menudo, la depresión comienza con motivo de un evento negativo. Sin embargo, la reacción es desproporcionada o muy prolongada respecto con el hecho que la origina y termina afectando la vida cotidiana y comprometiendo la salud.
La persona que sufre de depresión presenta un conjunto de síntomas como angustia intensa, lágrimas o llanto inexplicable sin causa aparente. Además, puede experimentar frustración, desesperación, pesimismo e incapacidad para disfrutar de algo. Entre los síntomas de la depresión más frecuentes encontramos:
- Frecuente estado de ánimo irritable
- Trastornos del sueño: dormir poco o en exceso.
- Problemas alimentarios: inapetencia o sobrealimentación: puede desencadenar anemia o sobrepeso y obesidad.
- Fatiga crónica. Desgano.
- Sentimientos adversos hacia sí mismo (culpa, rechazo, falta de autoaprobación)
- Problemas de memoria y concentración.
- Falta de interés en las actividades regulares, aún en las que le otorgan mayor placer y satisfacción.
- Desatención sobre su propio ser: falta de cuidado personal, aseo.
- Pensamientos autodestructivos recurrentes (muerte, suicidio, daño)
Depresión post parto
La depresión posparto es muy común en mujeres después de haber dado a luz. Afecta su estado de ánimo con una sensación de pérdida o tristeza. Los niveles de esta «tristeza» puede variar según los casos y acompañarse con otros síntomas como ansiedad, irritabilidad o fatiga. Este estado puede dificultar la realización de actividades regulares o relacionarse con otras personas de su entorno.
¿Cuáles son las causas de la depresión posparto?
Este trastorno femenino obedece a múltiples causas. Entre las cuales se reconocen aquellas de tipo físico o biológico y aquellas de tipo psicológico o emocional.
Una vez producido el parto, la mujer experimenta una disminución de los niveles de estrógeno y progesterona en su cuerpo. Este desequilibrio hormonal también genera cambios químicos en el cerebro. Esto explica los frecuentes cambios en el estado de ánimo, sin causa aparente. En ciertos casos, esta condición también produce problemas en conciliar el sueño, con un consecuente estado de fatiga y desgano, baja energía y falta de interés.
Síntomas de la depresión post parto
A continuación te compartimos los síntomas más frecuentes de depresión posparto que desarrollan las mujeres que han dado a luz:
- Trastornos en el sueño: dormir mal, poco o dormir demasiado.
- Sentimiento de profunda tristeza, vacío interior o desesperanza.
- Cambios repentinos en el estado de ánimo: malhumor, enojo e irritabilidad.
- Llanto frecuente y espontáneo, sin causa aparente.
- Ansiedad y excesiva preocupación.
- Dolor y molestias: dolores de cabeza frecuentes, trastornos estomacales o intestinales y dolor muscular.
- Trastornos en la alimentación: comer en exceso o muy poco.
- Aislamiento: de la familia, amistades y grupos afines.
- Dificultad para desarrollar un lazo emocional con el bebé.
- Sentimiento de incapacidad o inutilidad en el cuidado del bebé.
- Pensamientos destructivos: pensar en provocarse daño a si mismo o a su hijo/a.
- Problemas de memoria y concentración.
- Pérdida de interés.
- Irritabilidad frecuente.
- Trastornos del sueño, insomnio, dificultad para relajarse.
- Problemas en la alimentación (por exceso o disminución) causando una suba pronunciada o baja sustancial de peso.
- Inactividad, fatiga crónica, desgano, poca o nula motivación.
- Desarrollo de sentimientos negativos hacia sí mismo como culpa, desprecio, rechazo y otros adversos.
5 técnicas que reducen el riesgo de depresión
Realizar actividad física regular
Hacer ejercicios de manera frecuente libera endorfinas. Estas son las hormonas que mejoran el estado de ánimo, elevan la temperatura corporal y ofrecen un efecto calmante sobre el sistema nervioso.
Dormir bien
Para mantener tu salud mental y física, asegúrate de dormir bien. Según la American Sleep Foundation, las personas con insomnio tienen un riesgo 10 veces mayor de desarrollar depresión en comparación con las que disfrutan de un sueño reparador e ininterrumpido.
Meditar para reducir la ansiedad
La ansiedad crónica es una de las causas más comunes de la depresión. Es importante aprender a manejarla de forma efectiva para cuidar de tu salud mental. No cargues sobre tus hombros más peso de lo que tu cuerpo soporta: tener a tu cargo demasiada responsabilidad puede hacerte daño. Realiza alguna técnica de meditación y/o relajación. Asume tus limitaciones y no pretendas cambiar aquello que no puedes dominar.
Alimentate adecuadamente
Una investigación sugiere que el consumo de grasas trans, carbohidratos, azúcar y el aumento de peso son factores que aumentan el riesgo de depresión. Procura agregar muchas frutas, verduras, grasas buenas y proteínas puras a tu dieta regular.
Socializa y crea vínculos sólidos
Las personas que mantienen fuertes lazos sociales y emocionales con otras personas de su entorno tienen mayores probabilidades de reducir o superar la depresión que quienes se encuentran aislados. Busca compartir momentos con tus familiares, amigos y grupos de afinidad.
¿Qué te pareció este artículo? ¿Y si lo compartes con alguna persona que tenga depresión? ¡Entre todos podemos hacer mucho por la salud de otras personas!